irrespetoPregunta. Estoy teniendo algunos problemas con mi hijo de 5 años de edad, habla de una manera que empuja mis botones. A veces habla con un tono de voz descarado, como gruñón. Piensa en el tono de voz que va acompañado  de "las manos en las caderas." Estoy confundida acerca de si se trata de un comportamiento que es apropiado limitar? ¿O es una señal de que ella se ha extraviado emocionalmete y la tengo que dejar ventilarse? ¿Algún consejo ? Palabras sugeridas para utilizar en ese momento con ella serían muy útiles. Gracias !

 

 

 

Desde luego conozco el tono atrevido que quieres decir y responder a eso puede ser un reto para los padres!

Los niños saben que sus padres están comprometidos con ellos, así que con sus padres, sus sentimientos están más cerca de la superficie.

Se atreven a pedir atención que no se atreverían a hacer en otros entornos. Es un cumplido para vos - has creado un ambiente emocionalmente seguro en el que tu hija confía que no siempre tiene que ocultar las tensiones que siente .

Creo que una señal de que un niño está "emocionalmente extraviado" es suficiente para actuar. Pocas veces los niños corrigen su curso por sí mismos y sin ayuda. Siempre es mejor responder cuando nos han dado una sola señal: para la segunda o tercera señal que un niño expresa, ya nos sentimos molestos, nos sentimos víctimas de la circunstancia, y en ese estado emocional, somos mucho menos capaces de responder cuidadosamente.  

El esperar tanto es como permitir que un cachorro fugitivo lleve tres cuadras antes de empezar a tratar de atraparlo. Tres pies de escape ya te da suficiente información para decidir que es hora de poner la correa.

Una señal que dice: "Yo no me siento conectado a ti" es una invitación a intervenir. Más señales vendrán si el niño aún no se siente conectado emocionalmente pero todas las señales van a ser más irritantes que la anterior.  

Restaura la conexión después de que un tono descarado ha hecho su aparición: En la intervención, tu objetivo es restablecer la conexión entre vos y tu hijo. Es ese sentido de conexión que ayudará a tu niño a pensar, cooperar y tomar buenas decisiones. El castigo, la crítica, o el tiempo fuera (sillita de pensar) termina de intensificar la distancia entre vos y tu hijo. La mente de los niños no funciona adecuadamente con distancia emocional. Están construidos para un sentido de conexión constante y continua. Es la sensación de la distancia (no sólo el comportamiento que indica la distancia), que es el problema de fondo. Ya veremos como construir un puente que nos acerque.

Comunicación Reflexiva: Es posible que desees comenzar diciendo algo simple que le de alguna información necesaria . "No me gusta cuando escucho a la gente hablar de esa manera" es honesto y claro sin culparla a ella. O, " Me gusta más cuando me hablas amablemente". Si tu hijo puede cambiar su tono significa que no estaba tan lejos emocionalmente y la has podido guiar de vuelta a la comunicación reflexiva.

Intervención lúdica: Si su respuesta es simplemente una mirada o más señales de una actitud negativa, se necesita algo más para guiarla nuevamente al camino. La intervención lúdica es un buen próximo movimiento - que le ofrece calidez y creatividad. Podrías tomar un animal de peluche en la mano o algo similar y con buena actitud decir: "Yo soy el Sr. Fuzzy y estoy aquí para inspeccionar los oídos de mis amigos. Suena como que puedes tener dolor de oídos! ¿Puedo ver tu oreja, por favor? " Y colocar la nariz del señor Fuzzy en un oído, luego el otro. Otra intervención lúdica sería "Ven aquí para agarrarte" con un tono juguetón o "Me parece ver algunos codos que se sienten muy solos!" Acompañado de una persecución a plantar besos en los codos o cualquier otro tipo de juego cálido y tonto de contacto, para tratar de conseguir la risa y reestablecer conexión emocional .También podrías exagerar juguetonamente su reacción "Ooooo! No puedo soportar oír ese tono atrevido de la voz!" Y huir cubriendo tus oídos o intentar ocultar tu cabeza bajo el brazo, etc. También podrías jugar al padre desconcertado, "¿Vos oyes una persona hablando feo en esta habitación?" y mirar debajo de los muebles y detrás de las puertas, tratando de encontrar el "delincuente" .La respuesta de tu hijo te hará saber más sobre el peso del malestar que está llevando. Si ella es capaz de reír y disfrutar de la invitación para jugar que has ofrecido, puede desvanecer los sentimientos de mal humor con unos momentos de juego y de risa. La risa le devuelve su sentido de conexión. Si hay tensiones más pesadas retumbando por debajo de su actitud, entonces tu oferta para jugar intensificará su malestar. Ella va a responder con más "actitud".En este punto, el juego no va a ayudar. Un límite lo hará. Acérquese, ofrece contacto visual, y puedes decir algo como: "No puedo dejar que me hables así. Ven y siéntate conmigo un minuto. Dime qué es lo que pasa." Entonces, escucha. Si tu hijo sigue hablando igual, intenta seguir coneéctandote con ella. Dile: "Amor, algo te hizo sentir mal, y realmente quiero saber lo que pasó." Estás tratando de frenar sus arrebatos verbales lo suficiente como para que ella pueda sentir los sentimientos que alimentan su actitud. Acercarse, estar segura de que ella es una buena persona, e insistiendo en que ella tiene que parar, y sin haberla amenazado, le ayudará a sentirse lo suficientemente segura para finalmente estallar en lágrimas o una rabia tormentosa. Este es un avance. 

La libertad de la boca: Dele a su hijo la "libertad de la boca", mientras que ella está teniendo una rabieta o llorando. Durante las lágrimas y la explosión emocional, el niño se encuentra en medio de un proceso de curación, y está expresando sus sentimientos de ira y tristeza lo mejor que puede. Decir esos sentimientos y mostrarlos a través de las lágrimas o pataletas difunde su poder. No tiene sentido exigir buenos modales mientras que un niño está en la liberación de los pensamientos venenosos en medio de un buen llanto. Usted quiere que esos estén fuera, no adentro. Después, reconectados, habrá tiempo para lo demás.

Pero si no hay llanto, ni calor del cuerpo, o temblores, nada húmedo o grande, establece el límite firme y cercano hasta que pueda llegar al proceso de curación (desahogarse). Llamamos a este tipo de escucha " Staylistening." Es simple y profundamente eficaz para restablecer el sentido de la cercanía y la dulce alegría de un niño.

Ahora ya sabes, el tono es un indicador de la seguridad emocional y cercanía de un niño en determinado momento.

Cuando esto pase (y va a pasar) no lo alejes de ti (eso incrementa el problema), acércalo ya sea mediante una indicación simple, o mediante el juego o mediante un límite empático que le permita desahogarse contigo. Entre menos la distancia emocional, mejor!

Respira y recuerda acercarla a vos, no alejarla. 

Link original: http://www.handinhandparenting.org/article/reduce-childs-angry-tone-of-voice/

Por: Laura Markham

 

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Traducido por:

Andrea Acosta, Psicóloga

"Disciplina con Empatía": www.disciplinaconempatia.com

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